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martes, 21 de abril de 2020

CAMINAR Vs. CORRER





CAMINAR VS CORRER
DOS ACTIVIDADES COADYUVANTES EN LA SALUD CARDIOVASCULAR Y EN EL BIENESTAR GENERAL COMO FUENTE DE VITALIDAD Y ENERGÍA PARA POTENCIAR LA CREATIVIDAD Y GANARLE AL SEDENTARISMO. EN AMBOS CASOS ESTAS ACTIVIDADES FÍSICAS EL BENEFICIO AUMENTA CUANTO MAYOR ES LA DISTANCIA RECORRIDA.


¿Cuál de las dos dirías que es mejor?

Un running va corriendo por el asfalto de cualquier avenida transitada en las urbes del mundo y se cruza de frente o le pasa por al lado a un caminante asiduo. Ambos se saludan y uno piensa del otro: “Corriendo como loco sin mesura, lesiones a la vista segura”. Por otro lado al corredor responde con un gesto levantando su mano y moviendo el rostro, mientras piensa  “a paso lento, la salud se vuelve un convento”

Muchas personas cuando desean empezar a caminar o correr se encuentran en una encrucijada. Estando ahí delante de la decisión dudan con cual actividad dar inicio a una nueva forma de vivir en equilibrio ganando bienestar general. La respuesta va a varias de factores intrinsicamente vinculados con la salud para el momento del practicante.

Siempre la primera opción corresponde visitar a su médico y que sea él quien le diagnostique que aspecto de su salud debería mejorar. De esta manera según la edad el peso corporal y los resultados medicos de sus evaluaciones le permitirán a su galeno dar orientación al respecto. Porque dependerá incluso de cual aspecto de salud Ud., desea mejorar. Ahora bien, lo que si le podemos asegurar es que indistintamente que Ud., valla acelerado o valla lento obtendrá los mismos resultados siempre que las distancias recorridas sean proporcionales en esfuerzo físico cardiovascular.

Ambas actividades permiten disfrutar de descargas masivas de endorfinas. Y son  capaces de funcionar como activadores del bienestar general disfrutado como resultado de la práctica rutinaria. De aquí la valiosa oportunidad de hacer de esto un hábito saludable. Ganándole a la vida sedentaria que atrae las enfermedades como la hipertensión y la obesidad.

Muchas personas que han leído el libro “Corro luego pienso” me han escrito para preguntar con cual actividad iniciar. Incluso me han escrito de diferentes países para recibir alguna recomendación de mi parte. La primera recomendación siempre será asistir a su médico y realizarse un chequeo completo.

¿Y esto porque?

Si se una personas acaba de ser diagnosticado con sobre peso exceso de colesterol o problemas de su actividad coronaria, no se le recomendaría correr. En este caso las recomendaciones estarían más asociadas a caminar según un plan diseñado en cuanto a la distancia y la cadencia del paso y adicional podría trabajar en clases de natación.


Lo que si podemos estar seguro y así lo demuestran estudios realizados por la universidad de california. Es que tanto caminar distancias largas como correr influyen de forma positiva en la reducción de desarrollar el riesgo de la hipertensión, exceso de colesterol, diabetes y estrés. Incluso estudios puntuales han demostrado que la mayor incidencia puede encontrarse en la reducción del riesgo de padecer diabetes.

Los mismos estudios realizados muchos de ellos por laboratorios especializados han demostrado que tanto caminar como correr impactaran de forma positiva en la salud si son tomados como rutinas habituales. Los resultados han demostrado con el tiempo, que no es necesario esforzarse al más alto nivel ni ir más rápido, si Ud., desea reducir el riesgo cardiovascular. Para ello solo será necesario practicarlo en intervalos moderado de su frecuencia cardiovascular no superior al 80%, con tiempos superiores a 35 minutos de forma recurrente.

Ahora bien recuerde que cuando se corre se suele consumir aproximadamente el doble de energía que cuando se camina. Entonces para conseguir los mismos efectos, tome en cuenta pasar el doble de tiempo caminando que corriendo. Una buena opción para quienes van empezar por primera vez, experimentar caminando y correr espacios cortos. Pueden empezar caminando 4 minutos y corriendo 1 minuto, mientras van habituando su organismo.

Específicamente en particular hago énfasis en las personas con sobrepeso diagnosticado. Si no están acostumbradas a practicar actividad física les recomiendo primero caminar; después, a medida que mejora el estado físico, se puede iniciar un trote suave e ir aumentando el ritmo progresivamente. Preferiblemente de la mano de un Coach con experiencia en Educación Deportiva.

¿Cuál te animas a practicar caminar o correr?

No importan cual decidas al final tu cuerpo se manifestara y te guiara con cual quedarte. Lo vital será moverte y tomar el control de tu salud y bienestar general, porque el sedentarismo causa todos los beneficios aquí recordados pero de forma opuesta.