EL VALOR DEL COMPROMISO Y LA LEALTAD
LA FELICIDAD EN LA RELACION DEBE ESTAR CONCENTRADA EN EL PRESENTE Y NO EN EL PASADO NI EL MAÑANA. PORQUE EL PRIMERO GENERA DOLOR Y EL SEGUNDO ANSIEDAD. Y ES AHÍ DONDE SE FORMAN GRIETAS QUE
CULMINAN DEBILITANDO LAS BASES DE AQUELLO QUE UNA VEZ UNIO A LA PAREJA
Créditos: @machadoroy
Veinte años al lado de una hermosa mujer,
quien me dio la oportunidad de iniciar una vida como esposo padre amigo pero
sobre todo como ancla para permanecer a su lado. Me ha permitido transitar el camino de la transformación, obteniendo una especialización centrada en un cúmulo de experiencia a través de la mejora continua. Para aprender de esta forma la diferencia de dos conceptos fundamentales en la vida marital. Hablo del compromiso con la fidelidad y la lealtad. Ambos dentro del juramente sagrado perteneciente al deber o pacto más alto asumido en nombre del amor, el matrimonio.
Menciono el compromiso más elevado, porque parto
de la premisa otorgada a la importancia del matrimonio dentro de la sociedad y
el mundo. "El futuro depende,
en gran parte, de la familia, lleva consigo el porvenir mismo de la sociedad;
su papel especialísimo es el de contribuir eficazmente a un futuro de paz” Juan
Pablo II
El afán en demasía por el mañana al igual que
vivir en el pasado nos aparta de disfrutar de la oportunidad del presente del
ahora. Pasamos por alto que ser felices podría partir de vivir desde la simpleza
de comenzar cada mañana agradeciendo. Porque un estado emocional relacionado intrínsecamente
con la resolución o espera del desenlace de problemas económicos familiares o
laborales, termina causándose todo aquello capaz de nublar la dicha del
presente.
Podría resultar recurrente en la pareja la
longevidad de aquellos episodios de ansiedad y frustración que dan paso a los pequeños
problemas. Además de ser las causas de su aparición pueden generar un dificultad mayor la
falsa generación de expectativas uno del otro. Así como también la ausencia de
planes de vida desarrollados en conjunto, efecto que podría conllevar
al cobijo de un sentimiento desconsolador.
Ahora bien, volvamos a lo medular del tema la
fidelidad y la lealtad. Pareciera dentro de lo cuestionable que la fidelidad no
es algo de peso o tangible. Básicamente, porque cuando estamos frente a ella, entendemos se trata del respeto a los valores de la moral y confianza otorgada uno en el otro. Esta última la misma zurcida a mano en cada acción hecha por
la pareja en la construcción de una vida juntos. Además, la fidelidad se refiere
a lo expansivo del corazón para albergar hechos reales llenos de vivencias. Protegidas por ella misma, en su franqueza confianza y nobleza de hacer de ella la fidelidad, un
espacio protegido y considerado inviolable.
Por el contrario la lealtad, tiene que ver
más con el compromiso asumido en consecuencia de los sentimientos. Se puede
considerar más tangible por su estrecha relación a los acuerdos contraídos. Por
ejemplo en el matrimonio podrían surgir acuerdos de conveniencia y estos
estarían asociados a la lealtad, como compromiso incluso de confidencialidad.
Si entendemos esto, podremos hablar en
consecuencia de los detonantes en la extinción del compromiso dentro de la relación. En concreto, las acciones capaces de iniciar esa ruptura que atropella las
relaciones afectivas. Explicare desde mi experiencia y mi óptica aquellos
errores sobrevenidos, antes de la puesta en marcha de la maquinaria de la separación o el divorcio. Mi intención será vincularte a ti como lector, en un contexto que te permita utilizar esta
información a favor de la fidelidad y la lealtad.
ü Diferencias pequeñas ofensas: nace
en la relación pequeñas ofensas derivadas de las desavenencias propias de la
vida marital. Desacuerdos donde la
ansiedad y el dolor comienza abrir una grieta. Y a través del peso acumulado
del constante abuso de actos incongruentes al amor se va dilapidando
deteriorando y fracturando las bases sobre las que se consolido el matrimonio.
Explico
con un caso hipotético
imagínese que Ud., es de los que enamoro a su pareja con
acciones como la responsabilidad y puntualidad. Entonces comprenda Ud., no
podrá tener un cambio drástico en su conducta sin causales previstos.
Si Ud.,
comienza a llegar tarde a todas sus citas dentro del compromiso con su pareja, sin justificación aparente, incluyendo la hora de llegar a casa. Entonces se encontrará Iniciando un causal de
pequeñas ofensas, abriendo la puerta a la duda y la desconfianza.
ü La duda: se
convertirá en la acción capaz de originar la dicotomía dentro del matrimonio y
es la causante de desunir las fuerzas que mantienen la sinergia dentro de toda relación armónica.
Así
reza el refrán “divide y vencerás” una división causada por la duda y también el
miedo de asumir la responsabilidad de confrontar la realidad. Aquí vendrán los deseos
veleidosos a tomar más espacios de lo que deberían tener dentro de un corazón
comprometido.
De
repente comienzas a compartir con personas inestables quienes incluso ya han
vivido uno y hasta dos o más divorcios. Seres quienes no están comprometidos
con tu causa.
Y aquí
en esta fase lamentablemente comienzas a identificarte con ellos, empujándote a
un callejón sin salida. La apatía se hace presente y con ella la discordia.
Recuerda que esta última es la raíz de la amargura es la forma envolvente de abrazar
tu relación o matrimonio para causarle más heridas.
Solo tú eres el responsable de que
esto ocurra. Si la amargura esta de tu lado, entonces la discordia estará
tocando la puerta para abrir paso al uso toxico del lenguaje y trato.
Recuerdas
el ejemplo de las llegadas tardes. Bueno, aquí las personas no comprometidas te
dirán cosas como: “Tú tienes el derecho de llegar tarde y no dar explicaciones”
Por
el contrario
Un ser comprometido a tu causa te ayudara, explicándote que tú mismo
deberías preguntarte
¿Qué estoy causando con mis llegadas tardes en mi relación?
¿Estoy siendo empático con mi pareja esposa o esposo?
¿No explicar las
razones de mis llegadas tarde, beneficia mi relación amorosa?
ü Uso toxico del lenguaje y trato: en
esta fase es donde el lenguaje y el trato se convierten en el arma hiriente
producto de la discordia. La intención, es causar daño a través de la palabra o el trato. Se da inicio así, a una relación
posiblemente en ambas partes donde salen a relucir, aquellas acciones no solucionadas en la
fase de las pequeñas diferencias que posteriormente llevaron a la duda.
Si
decides seguir los consejos de las personas no comprometidas a tu causa,
tomaras opciones asociadas a lo tóxico del lenguaje y trato. Abriendo una
brecha a la necedad de la conducta irreverente y grosera.
Si
das la oportunidad al compromiso que te motivo a la aventura de tu relación amorosa, podrías
hacerte preguntas como:
¿Con mi lenguaje y trato a donde espero llegar?
¿Qué fue
lo que me enamoro de ella o el?
¿Correspondo recíprocamente al amor con el uso
toxico del lenguaje y trato?
ü La necedad: la
apatía el desdén la ira y la venganza se apoderan del ser porque no acepta
desde su interior con humildad y fe, que puede encontrar la solución. Aquí solo
la venganza se hace dulce para el alma enferma porque estas en el punto de no
retorno. Desde el primer momento donde aceptes la existencia de una fuerza
superior a nosotros mismos empezaras a ver salidas.
Utiliza
la herramienta del autocuestionamiento para lograr grandes avances, doblegando
sentimientos encontrados y causantes de heridas profundas. Tales como el orgullo la rabia
la venganza, elúdelos con pensamientos empoderantes como aquellos que te unieron en amor. Y lo más importante no te fijes en el reflejo de personas no comprometidas a tu
causa.
Todo aquí expuesto es parte de vivencias recogidas a través de los años. Sin perder la hondura ganada con el esfuerzo resiliente de un aprendizaje soportado en la fe. Básicamente enfocándome en lo positivo optimista pero sobre todo asertivo. Donde el abrazo nutritivo y valioso de mi relación afectiva dentro de mi evolución como ser humano crecen de la mano. En lo particular he podido construir una mejor versión de mi existencia junto a una esposa brillante, quien ha asumido un rol inédito dentro de nuestra relación. Y de esta forma entre ambos poder vivir al lado de nuestras hijas el hoy, un presente enfocado en un futuro con generaciones de relevo donde el valor a la lealtad y la integridad del ser humano, no sea una opción sino una decisión.